¿Acaso ver a la vida como un juego de máscaras y actuaciones es tener una visión pesimista?
Si todo se basa en las performances y perspectivas y focos, se reduce la realidad a una simple mentira, a una cuestión parcializada e imposibilitada de ver en su totalidad, de comprender realmente. Duele pensar que nunca vas a entenderlo todo, ¿no, ser bobo?
Escena uno. Nacemos, comemos, aprendemos a respirar: bienvenidos al mundo. Se siguen los instintos, se hace lo que se piensa y no se piensa lo que se hace; todo está justificado, estamos aprendiendo a ser.
Escena dos. Nos dedicamos a crecer, a absorber las fallas humanas, a aumentar y aprender a aplicar las natas. Comienza el juego de máscaras y, con unos pocos años encima, se definen los roles de cada uno dentro de un grupo, comienzan los amores infantiles y un ello colapsado que busca liberarse. Entre nosotros, empieza la función.
Escena tres. La adolescencia asoma su naricita, las hormonas revolucionadas piden a gritos una satisfacción a corto plazo; la sexualidad a flor de piel. Ya estamos metidos en el baile, bailemos ¿qué más da? Aprendimos que para sobrevivir es necesario adaptarse a ciertos parámetros imposibles de esquivar y que, pese a que se intente y se haga lo opuesto, se cae en otra banalidad preconceptuada.
Las palabras, para muchos, pierden importancia -te amo, te odio, dame más por doquier- y algunos literatos cansinos reivindicamos su esencia, justificando a los significados y significantes que nos enseñaron en nuestro pasado generando en algunos seres triviales una especie de cuasiadmiración hacia lo originario y establecido. Somos soldaditos de las estructuras.
Creemos que nos enamoramos y nos hacen mal. Canalizamos con las palabras, le hablamos al originador de nuestro sufrimiento como si realmente pudiera entendernos. No lo hace, no le importamos. Una persona más de su lista:
Una y otra vez. Todo el tiempo, la misma película, los mismos personajes. Over and over and over and over again. Es un okupa de mi abandono. Se come mi cerebro, mis pensamientos, mis lágrimas, mi tiempo. Siempre lo mismo. Over and over and over and over again ¡Dejame avanzar! ¡Desatame! ¡Desencadename! ¡Dejame ser libre, por favor! Soltame. Basta. Quisiera que dejara de tragarse mis palabras, que me devolviera mi poder ¡SALÍ DE MI EJE! ¿Acaso te alimentás del sufrimiento ajeno? ¿Qué clase de ser endemoniado sos? ¿Qué clase de poder maléfico tenés que llevás a todas al borde de la locura? ¿De qué parte del infierno venís? Salí de mí, yunque.
La escena tres es una de las más complejas: se baten a duelo la niñez libertadora con la adultez apremiante; se busca el equilibrio constantemente (¿y si la vida fuere eso, una búsqueda constante del balanceo de situaciones y emociones?). Aquellos que no se adapten a la actuación perpetuada en las afueras de nuestro mundito interior, son excéntricos, desadaptados y hay mecanismos sociales que permiten "encausarlos": cárceles, psiquiátricos, institutos y demás.
Escena cuatro. Una adultez en la que no he ingresado, por lo tanto no podré detenerme, pero en la cual se debe dejar el legado de las máscaras, para que el mundo sobreviva en su estado actual.
Escena cinco. Se aproxima la muerte y los adultos adeptos a las actuaciones se liberan ¿qué más da? Ya no estamos muriendo, vivamos la vida, eaeaea.
Sí, las máscaras me superan, me baten, me derriban. Siempre envidié a los que podían zafarse de la teoría. Yo no puedo. Nunca pude. Aunque me duela, soy una militante del puritanismo, aunque no en el sentido más estricto. Una especie de neopuritana siglo XXI: tradicionalista, casera, con breves ajustes modernos. Un extraño mix que conforma mi accionar diario. Un superyo desarrollado en plenitud y sin moderación ¿Me liberás?
5 comentarios:
Me encanto la escena tres...
Es tan tan tan tan algo que no se como decirlo.
Brendu: ¿Me liberás?
Seb responde: No =D.
(Mi egocentrismo a flor de piel).
Muaa, deberías actualizarlo mas seguido porque es genial leer estas cosas
Que bella la escena tres... !!
Más bello actuarla contigo Bren!
Que palabras tan justas...
Es verdad, deberías actualizarlo más seguido...
Love u
Ya no estamos muriendo, vivamos la vida, eaeaea.
eso de llamarlos yunques me parecion muy genial...todo el texto muy genial, y todo lo demas muy muy bonito....
beeso..
No se si te libero, pero que te quiero muchito si!!! te quiero muchito!! t lo dije? me encantó...
Sabes que escribís muy bien, y que es un placer leerte... ya te dije, es un placer para mis ojos mi querida.
Empeza a respirar amore ...
Besiñus miles ...
Te firmo otra vez solo para
firmarte
otra vez y para decirte que no, que
no te falta el aire, solo q sale
despacito para ver si no empaña el
vidrio y te quedas sin visión de lo
que pasa afuera :P
I love you niña...
Publicar un comentario