(algunas de las excéntricas respuestas geniales de este loco personaje)
Salvador Dalí
Autor: L’Express. Publicación en castellano: Panorama, 6 de abril de 1971.
Usted, que ama las catástrofes, las abominaciones, ¿qué piensa de la bomba atómica?
Me gustan tanto las catástrofes que estoy listo para recibir una bomba atómica en la cabeza. Con una bomba atómica, uno sólo se arriesga a ser desintegrado, a pasar del estado de hombre al estado de ángel. Nada que perder, todo por ganar.
Acaso lo monstruoso forma parte de la fiesta, para usted?
¡Y no! Me gustaría muchísimo reventar seres vivos. No lo haré, porque estoy contra la pena de muerte. Pero cuando se trata de animales, tengo menos escrúpulos. Más sufren, más contento me pongo. Lo que más me gustaría, sería poner bombas en el interior de 8 cisnes y verlos explotar estroboscópicamente.
¿Cómo concilia ese aspecto cruel de su carácter con el amor que profesa a su mujer?
Gala, de cualquier manera, es una excepción en todo. Pero siempre dije que si Gala muriera, me gustaría comerla.
¿La trozaría?
No. Si fuese posible que, muerta, Gala empequeñeciera como una aceituna, entonces la tragaría. El canibalismo es una de las manifestaciones más evidentes de la ternura.
¿En qué es tan excepcional Gala?
Me hizo ganar todo el dinero que poseo.
¿Y qué más?
Fue la primera con quien hice el amor. No es que me guste mucho hacer el amor, pero tenía 29 años y me creía impotente. Gala me reveló a mí mismo. Jamás hice el amor con nadie más.
Para ver la entrevista completa: click acá
23 de junio de 2008
¡Qué linda locura!
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
Una última palabra, Salvador Dalí. ¿Es un hombre feliz?
Usted vio perfectamente que durante esta charla no me aburrí un segundo... Sobre todo, [b]no olvide añadir un poco de confusión en el texto si las cosas aparecen demasiado claras...[/b]
jajajaj genial, Dali (L)
Publicar un comentario